Los plásticos: un problema ambiental y de salud y la elaboración de películas biodegradables
En la actualidad el uso masivo de plásticos ha evolucionado nuestro ritmo de vida, toda vez que se han incorporado a casi todos los aspectos de estilos de vida cambiantes (Singh et al., 2022a), convirtiéndose en uno de los mayores retos ecológicos y sanitarios de nuestro tiempo.
La producción mundial de plástico ha superado los 400 millones de toneladas anuales, generando una contaminación ambiental ya que gran parte de estos productos termina en vertederos, ríos y océanos (UNEP, 2021). Desafortunadamente la mayoría de los plásticos no son biodegradables, lo que significa que pueden permanecer en el medio ambiente durante siglos, afectando los ecosistemas terrestres y marinos, incluso algunos animales se han visto atrapados en estos plásticos generando su muerte (WWF, 2020).
Se han realizado investigaciones y se ha observado que los plásticos cuando se degradan liberan micro plásticos, detectándose la presencia de estos en agua potable, sal de mesa y sangre humana (Heather et al., 2022), lo cual puede causar riesgos a nivel celular y sistémico, por el contenido de tóxicos presentes en los mismos.
Actualmente existen iniciativas para promover el reciclaje, siendo el 10 % del plástico el que se recicla adecuadamente (OECD, 2022), por lo que se requiere de una solución integral que promueva el desarrollo de materiales biodegradables, cambios de consumo, hábitos y regulaciones.
Ante tal situación, surge la necesidad de desarrollar películas biodegradables a base de almidón, como una alternativa sustentable para sustituir a los plásticos convencionales. El almidón, derivado de fuentes renovables como maíz, yuca o papa, permite la elaboración de materiales que pueden degradarse en condiciones naturales sin dejar residuos tóxicos. Esta alternativa parece prometedora al plástico gracias a sus propiedades mecánicas, de barrera, fácil disponibilidad, no tóxico, insípido, biodegradable, ecológico y comestible (Singh et al., 2022b) con aplicaciones en empaque de alimentos, recubrimientos comestibles y productos de un solo uso. Su desarrollo no solo contribuye a reducir la contaminación por plásticos, también promueve el uso de materias primas locales y el aprovechamiento de subproductos agroindustriales.
Frente a este panorama, es urgente repensar nuestra relación con los plásticos, creando innovaciones que sustituyan los plásticos actuales. Mediante acciones colectivas podremos reducir el impacto de los plásticos en el planeta y en nuestra salud.
Referencias:
Heather A. L., Martin J.M. van Velzen, Sicco H. Brandsma, A. Dick Vethaak, Juan J. Garcia-Vallejo, Marja H. Lamoree, (2022). Discovery and quantification of plastic particle pollution in human blood. Environment International, 163, 107199.
OECD (2022). Global Plastics Outlook: Economic Drivers, Environmental Impacts and Policy Options.
Singh, GP, Bangar, SP, Yang, T., Trif, M., Kumar, V. y Kumar, D. (2022a). Efecto de la incorporación de aditivos en las propiedades de las películas comestibles a base de almidón: Una revisión. Polímeros , 14 (10), 1987. https://doi.org/10.3390/polym14101987
Singh, AK, Kim, JY y Lee, YS (2022b). Compuestos fenólicos en envases activos y películas/recubrimientos comestibles: Moléculas bioactivas naturales y nuevos ingredientes para envases. Molecules , 27 (21), 7513. https://doi.org/10.3390/molecules27217513
WWF. (2020). Plastics: The costs to society, environment and the economy.
UNEP. (2021). From Pollution to Solution: A global assessment of marine litter and plastic pollution. United Nations Environment Programme.
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